El día más largo del año, cuando la luz y la vida son abundantes lo honramos el 21 de diciembre en el hemisferio sur y esta celebración la llamamos Litha. El Sol es el protagonista de estos festejos y es ensalzado con múltiples hogueras.
La celebración del solsticio de verano se origina en tiempos anteriores al cristianismo. En esa época la gente creía que las plantas que germinaban oflorecían en ese día tendrían aún más poderes curativos de lo habitual, por esta razón solían recolectarlas en la noche más corta del año. Encendían grandes hogueras para protegerse de espíritus malignos, los cuales presuntamente vagaban en total libertad cuando el sol se ponía por el sur. En los años posteriores, las brujas utilizaron ese día para marcar una fecha que supuestamente poseía una gran carga mágica.
Así como en Beltane es momento de sembrar, en Litha tenemos que cuidar lo que sembramos pues la planta está brotando de la tierra. Tenemos que regarla,abonarla y, por sobre todo quitarle las malas hierbas que le impedirían crecer. Litha es definitivamente un tiempo para el sacrificio. Nos sacrificamos por nuestra esperanza de que la cosecha sea abundante. No hay seguridad de que lo será y quizásla duda nos confunda, pero tenemos fe de que sí habrá abundancia y cosecharemos lo que sembramos.
Otro punto a destacar de Litha es que durante este período, los frutos de la naturaleza también se sobrecargan de energía por lo tanto nos ofrecerán todo su poder energético y curativo. Lo malo de Litha no es el exceso de energía sino el saber encauzarla. Litha es también un período para la sanación del cuerpo y del alma.
Simbólicamente hablando, Litha es la época en la que el Dios reina en la naturaleza. Es el día más largo del año, a partir de ahora todos los días serán más largos que las noches y la luz reinará sobre las tinieblas. La tierra se inunda de fertilidad.
Las flores y los frutos colman de energía a la naturaleza, que se prepara para la cosecha.
Es un momento adecuado para retomar los proyectos que se han dejado pendientes.
En la mitad del Verano, el Dios Sol alcanza el momento de máxima fuerza y poder. Es la gran época en que es sumamente fácil y sencillo comunicarse con las hadas y los espíritus de la naturaleza. La magia está presente por toda la Tierra y los elementales hacen fiesta.
En tiempos ancestrales se le daba la bienvenida a Litha con grandes celebraciones en donde el exceso de comida y bebida era lo común, pero la Iglesia Católica, ávida de imponer sus creencias, quiso opacar esta fiesta designando el 24 de Junio como el Día de San Juan en el hemisferio norte y la Navidad el 24 de diciembre en el hemisferio sur, como hizo también con otras celebraciones antiguas. Sin embargo estas fiestas llamadas “paganas” se siguen celebrando en todas partes del mundo ya que en el sentido más amplio es simplemente honrar a la naturaleza...
... esto es Litha.
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