martes, 17 de febrero de 2009

En los zapatos de mi enemigo…



Cuando albergamos ira, rencor u odio hacia quienes creemos que nos han lastimado nos mantiene vibrando en las más bajas frecuencias creando estancamiento y girando en un eterno circulo que no acaba más.

Quizás una de las tareas más dificiles que he hecho en mi vida es justamente trabajar ese sentimiento terrible de impotencia ante la traición, el robo, la calumnia etc. Es lo más parecido a tener un fuego dentro de uno que nos quema y consume… Y bueno, tengo mi Sol en Escorpio, sextil Plutón, y éste a su vez trina a mi Luna… Dificil no ser intensa con mis emociones.

Aprender y comprender que fui yo quien elegí pasar por estas experiencia y vivirlas con esa intensidad– para evolucionar me ha ayudado mucho a liberarme de ese sentimiento… Siempre me impacto al saber cosas que dicen de mi, pero cuando pasa, me invito a la reflexión primero y luego a meditar… y le envío amor a esa persona… Otras veces quedo shockeada y soy incapaz de mandar amor… ya lo dije, soy intensa pero tampoco me enrrollo… dejo pasar el tiempo… y cuando me siento lista le mando amor… y siempre logro sanar esa situación… al menos por  mi parte.

Uno de los precios que se deben pagar por ir despertando es ganarse unos cuantos enemigos. Al rebaño no le gusta que te salgas de él y el mundo espiritual está también lleno de muchos egos… Resulta paradojico pero es así… 

Todas las personas que se van despabilando de este  sueño tridimensional sufren persecución y muchos terminan recordamos como mártires, así como el más grande de los Maestros a quien crucificaron sus propios amigos, porque les faltó conciencia para captar la esencia de su enseñanza… entonces, que me queda a mi que soy una alpargata toda roñosa al lado de El… Es así el camino del crecimiento. Pero bueno… cuando sabemos que lo que nos espera al final del camino es glorioso, caminamos con más gusto y menos dolor.

Antes, por formación religiosa, creía firmemente que, ante una afrenta debía poner la otra mejilla, y luego el brazo y luego el resto del cuerpo… y así… Pero desde que vivo mi proceso de despertar me revelo a esa práctica, sobre todo porque genera abuso y hay qienes viven perdonando y otros que viven abusando. Hay un momento en que debemos poner límites…

Siempre recuerdo un libro que me regaló la directora del colegio donde estudié. Una mujer santa y religiosa, la Madre María del Rosario, del poeta americano Henry Wadsworth Longfellow con una frase enmarcada con colores:

"Si pudiéramos leer la historia secreta de nuestros enemigos, encontraríamos en el dolor de cada hombre y el sufrimiento lo suficiente para desarmar toda hostilidad".

Y es así como, todos los días, aprendo a ponerme en los zapatos de quienes me hacen daño y siempre los termino comprendiendo y muchas veces hasta justificando.

Cada ser que se encarna viene a trabajar algunas áreas de sus vidas y el tema de las relaciones y los afectos los trabajamos todos los que habitamos el planeta. Es dificil… muy difícil…

Por eso mi invitación hoy es a calzar los zapatos de ese enemigo tuyo, ese que te pone muy creativo a la hora de planear una muerte lenta y dolorosa… Calza sus sandalias, viste sus ropas, sitúate en su espacio familiar y en su educación, en su cultura, en su entorno social… encontrarás que ha sufrido, que sus fracasos, sus carencias afectivas, las humillaciones que ha vivido, las discriminaciones de cualquier tipo, sus frustraciones, la burla, el desprecio, el abandono y muchas experiencias más le han convertido en lo que es y por eso se comporta así y tú estás en capacidad de comprender desde que herida de su alma ha salido la ofensa que te causa dolor…

Quizás la primera vez que lo hagas el ejercicio no funcione, pero puedes seguir intentándolo hasta que seas capaz de enviarle amor a tu enemigo… y pasado un tiempo ni recordarás el porque del distanciamiento con esa persona.

Puede parecerte intrascendente, pero si miras esta vida como la gran escuela del crecimiento no dejarías pasar la aoportunidad de salir adelante con todas tus materias…

Es solo una invitación a ponerte en el lugar de ese que llamas enemigo, pero que en realidad es tu hermano… y se convierte en maestro, cada vez que te hace trabajar tu compasión...

Me® 

sábado, 14 de febrero de 2009

Historia de San Valentín




Muchos piensan que en este día se celebra solo a los enamorados, el amor de parejas. La verdad es que estas fiestas sirven para honrar el amor en todas sus manifestaciones... Diríamos que estamos celebrando el Amor Universal.

Otra creencia muy popular es que esta celebración nace en los tiempos modernos, pero su origen se remonta a los la época del Imperio romano, pero los grandes centros comerciales y la publicidad la ha puesto de moda desde hace algunas décadas, con la única finalidad de vender regalos.

Aquí te contaremos la verdadera historia de esta celebración.

San Valentín era un sacerdote romano que vivió bajo el gobierno de Claudio III, quien decidió prohibir la celebración de matrimonios para todos los jóvenes, porque en su opinión los solteros sin familia eran mejores soldados, ya que así eran libres de cualquier atadura.
El sacerdote consideraba muy injusta esta medidad y desafió al emperador. San Valentín celebraba secretamente matrimonios para los jóvenes enamorados de la época – De ahí la idea de que San Valentín es el patrón de los enamorados –  El emperador Claudio se enteró de estas prácticas secretas y como San Valentín gozaba de un gran prestigio en Roma, el emperador lo llamó a Palacio y San Valentín aprovechó aquella ocasión para promover cristianismo por lo que el emperador ordenó que lo encarcelaran.
Asterius, un oficial encargado de encarcelarle, quiso ridiculizar y poner a prueba a Valentín y lo retó a que devolviese la vista a su hija, llamada Julia, que nació ciega. Valentín aceptó el reto y en nombre de Dios, le devolvió la vista a la niña. Este hecho impresionó tanto a Asterius y a su familia, que se convirtieron al cristianismo. Mientras, Valentín siguió preso y el débil emperador Claudio finalmente ordenó que lo martirizaran y ejecutaran el día 14 de Febrero del año 270. La joven Julia, profundamente agradecida del santo, plantó un almendro de flores rosadas junto a su tumba. De ahí que el almendro sea el símbolo de amor y amistad duraderos.
Mucho más tarde, entre el año 496 y el 498 después de Cristo, se estableció el 14 de febrero por el Papa Gelasio para la celebración en honor a San Valentín.
Actualmente los restos mortales de San Valentín se conservan en la Basílica de su mismo nombre, que está situada en la ciudad italiana de Terni, en Italia y cada 14 de febrero se celebra en dicho templo, una acto de compromiso por parte de muchas parejas que quieren contraer matrimonio al año siguiente.

La costumbre de intercambiar regalos y cartas de amor el 14 de febrero nació en Gran Bretaña y en Francia durante la Edad Media, Los norteamericanos adoptaron la costumbre a principios del siglo XVIII. Los avances de la imprenta y el bajón en los precios del servicio postal incentivaron el envío de saludos por San Valentín. Hacia 1840, Esther A. Howland comenzó a vender las primeras tarjetas postales masivas de San Valentín en Estados Unidos.

Aunque sean los enamorados los que principalmente celebran este día, sin embargo hoy en día se festeja también a todos aquellos que comparten la amistad, ya sea maestros, parientes, compañeros de trabajo y todo el que siente, tenga la edad que tenga, el olor del amor que, como una flor de primavera, nunca debe perder ese encantador perfume.

Ya conoces la historia... Ahora nos toca a todos cambiar esa idea de que esta es una fiesta solo para parejas sino que es una celebración para todos quienes desean honrar al Amor...

¡Feliz día del Amor y la amistad para todos mis queridos lectores!


Mer

lunes, 2 de febrero de 2009

Taroterapia




Entre las muchas opciones que tenemos para sanar nuestra alma se incluye la Taroterapia, término creado para definir el método de sanación a través del Tarot.

Las cartas del Tarot pueden ayudarnos a detectar aquellos bloqueos que llevamos en nuestro inconsciente y que son los causantes de que el flujo natural de nuestra energía se estanque, creando verdaderos tapones energéticos que son responsables de los conflictos que hoy presentamos. Una vez detectado el problema, podemos investigar la causal y así, conociendo las razones y orígenes de estos bloqueos es que empezaremos la terapia de saneamiento, para liberarnos.

El Tarot puede ser usado en 3 niveles de interpretación: físico, mental y álmico*, o lo que algunos llaman espiritual  y con ello podemos lograr descubrir en qué nivel se encuentran los conflictos humanos. Sabemos que revisando el pasado, podemos llegar a entender el porqué de las circunstancias presentes y con ello proyectarnos hacia el futuro. Siempre estamos a tiempo de poner soluciones.

La taroterapia nos proporciona asistencia cuando queremos confrontar  nuestras  necesidades en cualquiera de los niveles antes mencionados. Una simple, pero profunda lectura de Tarot puede ayudarte a hacer consciente cuáles son tus trabas y pedir ayuda para solucionarlo.

Comúnmente las personas se acercan buscando una lectura de tarot con la ilusión de que obtendrán soluciones mágicas, predicciones que anuncien abundancia y prosperidad, pero La magia que todos esperan del tarot, ocurre cuando comprendemos que somos los tejedores de nuestro destino y que toda causa o problema fue gestado por nosotros mismos en un pasado remoto y que seguiremos gestando las circunstancias del futuro. Ahí está la predicción del Tarot: que debemos hacernos cargo de lo que emitimos como vibración ya sea en palabras, pensamientos u obras…

Ya pasó el tiempo de las soluciones mágicas. Ahora todos sabemos que para resolver conflictos debemos trabajar en ello. Ya pasaron los tiempos de buscar afuera, es hora de buscar adentro las respuestas,  y en eso el Tarot se transforma en un excelente terapeuta, siempre y cuando sea guiado por una mano experta.

*álmico: Se reconoce al alma como el almacén del inconsciente y aunque muchos confundan alma y espíritu, son dos cosas distintas y el espíritu es luz radiante siempre, imposible de enfermar.


Me® 

domingo, 1 de febrero de 2009

La gente que me gusta



Me gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla, que no hay que decirle que haga las cosas, sino que sabe lo que hay que hacer y que lo hace. La gente que cultiva sus sueños hasta que esos sueños se apoderan de su propia realidad.Me gusta la gente con capacidad para asumir las consecuencias de sus acciones, la gente que arriesga lo cierto por lo incierto para ir detrás de un sueño, quien se permite huir de los consejos sensatos dejando las soluciones en manos de nuestro padre Dios.

Me gusta la gente que es justa con su gente y consigo misma, la gente que agradece el nuevo día, las cosas buenas que existen en su vida, que vive cada hora con buen ánimo dando lo mejor de sí, agradecido de estar vivo, de poder regalar sonrisas, de ofrecer sus manos y ayudar generosamente sin esperar nada a cambio.

Me gusta la gente capaz de criticarme constructivamente y de frente, pero sin lastimarme ni herirme. La gente que tiene tacto.

Me gusta la gente que posee sentido de la justicia.

A estos los llamo mis amigos.

Me gusta la gente que sabe la importancia de la alegría y la predica. La gente que mediante bromas nos enseña a concebir la vida con humor. La gente que nunca deja de ser aniñada.

Me gusta la gente que con su energía, contagia.

Me gusta la gente sincera y franca, capaz de oponerse con argumentos razonables a las decisiones de cualquiera.

Me gusta la gente fiel y persistente, que no desfallece cuando de alcanzar objetivos e ideas se trata.

Me gusta la gente de criterio, la que no se avergüenza en reconocer que se equivocó o que no sabe algo. La gente que, al aceptar sus errores, se esfuerza genuinamente por no volver a cometerlos.

La gente que lucha contra adversidades.

Me gusta la gente que busca soluciones.

Me gusta la gente que piensa y medita internamente. La gente que valora a sus semejantes no por un estereotipo social ni cómo lucen. La gente que no juzga ni deja que otros juzguen.

Me gusta la gente que tiene personalidad.
Me gusta la gente capaz de entender que el mayor error del ser humano, es intentar sacarse de la cabeza aquello que no sale del corazón.

La sensibilidad, el coraje, la solidaridad, la bondad, el respeto, la tranquilidad, los valores, la alegría, la humildad, la fe, la felicidad, el tacto, la confianza, la esperanza, el agradecimiento, la sabiduría, los sueños, el arrepentimiento y el amor para los demás y propio son cosas fundamentales para llamarse GENTE.

Con gente como ésa, me comprometo para lo que sea por el resto de mi vida, ya que por tenerlos junto a mí, me doy por bien retribuido.


Mario Benedetti


Me® 

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