Hay una poderosa fuerza habitando dentro de nosotros y que se manifiesta en
los momentos más difíciles… Justo cuando creíamos que caeríamos por el
precipicio; cuando nos sentimos desfallecer, cuando todo parecía perdido, esa
fuerza aflora y deja ver su potente luz…
Esa fuerza es tu poder interior. Una conexión con el Creador que está ahí,
siempre disponible para ser usada pero de la que la mayoría no es consciente de
ello.
Sabemos que hemos sido hechos a imagen y semejanza de quien nos concibió,
primero en su mente, y luego en este espacio/tiempo y que llevamos todo su potencial creativo en nuestra
genética espiritual. Es nuestra tarea descubrirlo y hacer uso de esa energía
cada vez que lo precisamos.
El Poder interior es todo lo que somos en esencia y lo más puro, lo
verdadero en nosotros pero está tan recubierto de máscaras que no lo dejamos
ver y somos incapaces nosotros mismos de verlo, mucho menos de sentirlo… pero
en los momentos difíciles, cuanto todo parece desmoronarse, cuando el ego baja
las defensas, cuando se siente acabado y destruido ya sea por la vergüenza, el
desamor, la soledad o la ruina, es ahí cuando tiene oportunidad de manifestarse
este poderío interno y empezamos a ver todo más claramente. Brota desde dentro
con un ímpetu irrefrenable. En medio del caos nos sentimos entusiasmados, vemos
la vida desde una óptica distinta y nos empoderamos. Ese día renacemos.
Volvemos a la vida con otra mirada, otra postura y otra actitud…
Ese poder interno es cultivable. Tú puedes desarrollarlo porque, aunque
todos nacemos con esa chispa interior, no todos le dan crecimiento. Pero para
ello debes primero encontrarte a ti mismo. Reconocer en ti las habilidades del
Creador y permitir su manifestación en el diario vivir.
El combustible de tu poder interior es la voluntad… Voluntad para hacer
cualquier cosa sin medir el esfuerzo que requiera… Voluntad para osar en los
momentos de cobardía… Voluntad para seguir cuando todo parece desmoronarse…
Nacemos poderosos, valerosos e invencibles… pero la educación se encarga de
desempoderarnos con la finalidad de controlarnos con mayor facilidad… y le ha funcionado
bastante bien hasta hace poco porque ahora ha llegado este momento de
reconexión con el Ser. Un tiempo de tanta energía luminosa que nos permite ver
entre tantas sombras y se hace imposible no conectar con nuestro propio poderío
interno.
Encuéntrate con ese poder siempre latente dentro de ti… abrázalo y
permítele fluir… deja que actúe, deja que corra, déjalo ser porque es tu propio
SER manifestándose cuando logras que el ego se calle… Eres TÚ y nadie más… es
tu Esencia Divina… es la fuerza del Creador implícita en ti. Es la fuerza de
esa misión que traes por cumplir… Es tu Poder Interior…
Si reenvias este texto, respeta el trabajo de la autora, no elimines ni cambies su nombre ni el texto. Cita la fuente correctamente. Se consciente de tu ética espiritual.
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