15 de abril 2014
Los rituales ayudan a
fijar las energías en el Universo ya que nos tomamos un tiempo para realizar ciertos
gestos que permiten poner la luz de la conciencia en cada movimiento que hacemos
y por eso las posibilidades de
manifestar un deseo se multiplican.
La energía que manará de
este eclipse es poderosísima –hay quienes dicen que este eclipse es similar
al que vivió Cristo en la cruz– y ya que nuestro satélite está en el signo de
Libra, acompañada de Marte retrogradando e impulsándonos a revisar todo el
camino andado, ambos planetas nos están invitando a sanar las relaciones… Sí,
todos esos seres con los que nos hemos vinculado a lo largo de nuestra vida nos
han dejado una huella, sea esta dulce o amarga, nos han entregado una lección y
el regalo del aprendizaje y crecimiento –que es la finalidad de toda relación–
y, seamos o no capaces de reconocerlo, debemos honrarles por ello.
De pronto la relación con
nuestra madre se encuentra herida (esté ella o no en este plano) y el Universo
nos está dando la oportunidad de sanarla. O puedes estar teniendo muy mal trato
con tu pareja o tus hijos… Si te llevas pésimo con tus compañeros de trabajo o
tu jefe, o no estás en posibilidad de
conversar con alguna persona porque que has perdido el nexo con ellas… Cualquier
situación de amistad, parentesco o idilio puede ser sanada con esta energía que
inundará al planeta.
Puedes hacer el ritual entre
los días 15 y 21 de abril, de preferencia en las mañanas, al despertar, en la
hora de los Ángeles, cuando la luz vence a la oscuridad y el alma se encuentra
mucho más serena después de que el cuerpo ha descansado entregándose al sueño.
Escribirás en una hoja de papel los nombres de todo
los seres con los que te has relacionado íntimamente en el presente y el pasado. Encenderás una vela de
color rosa o blanca mientras te concentras en los aspectos que quieres sanar.
Mirando al cielo empieza a enviar amor a todas esas
personas. Puede ser visualizando
que desde tu plexo solar sale una luz rosa que va hacia el otro y lo envuelve
completamente. Siente amor y compasión por el otro, siéntete uno con ese otro
ser… no hay división, no existe la separación… tú y el otro conforman una
unidad perfecta. Convéncete de que esa persona llegó a tu vida para mostrarte
aspecto de ti mismo quizás desconocidos hasta ese momento y reconoce que algo
te enseñó… Ahora déjalo ir… Suéltalo y déjalo partir en completa paz… Y así
hazlo con todos… Si no alcanzas todos en un día puedes hacerlo por etapas y dividirlos
en grupos para cada día.
Finalizas el ritual
nombrando a cada persona de tu lista y luego dirás:
Te honro y te bendigo por haberte
cruzado en mi camino y haberme espejado
por algún tiempo. Te envío luz y amor divinos…
Lo siento… Perdón… Gracias… Te amo…
Y así lo harás con todos…
no importa que sean muchas personas, concédete el regalo de este tiempo para
sanar todas las formas de relacionamiento en tu vida. Que la pereza no te
impida dar este paso que es fundamental para cerrar ciclos y poder reiniciar tu
vida.
Por último abrazas la hoja
de papel que contiene los nombres de todas las personas que te han acompañado
en esta vida y la pones en un plato o bandeja, lo quemas y esparces las cenizas
al viento como símbolo de desapego…
Y puedes continuar con tu
vida… Ya has sanado el aspecto más importante que hemos venido todo a trabajar
en este planeta y te has quitado mucha carga energética de encima…
Ahora a ser feliz!
En Amor y Conciencia.
Me®
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