domingo, 29 de enero de 2017

Trump, un alma servidora...



Parece tan contradictorio que en tiempos de mayor claridad y purificación, elijan como gobernante del país más representativo de lo que es nuestra sociedad, a un ser que carga sobre si mismo toda la energía de lo viejo, de lo que estamos dejando… un ser que vibra en paradigmas arcaicos y que provoca tanto rechazo… Y es la señal de que el viejo sistema patalea y está dando manotazos de ahogado.

En realidad puedes encontrar chocante y repulsivo a este personaje y reírte de su escasa evolución… pero ojo… cuidado con quedarnos solo en las apariencias. La mente dual quiere hacer juicios… pero el alma sabe que esto no es mas que el reflejo de lo que somos nosotros mismos…

Todas las almas vienen –venimos– con un programa ya trazado, aunque no lo recordemos, hemos escrito el guion, hemos diseñado el escenario y escogimos a cada uno de los actores que nos co-representaran… Y es así como esta alma servidora se ha puesto a disposición nuestra para hacernos de espejo y reflejar lo que hemos construido como sociedad.

Alguna vez hablé en este blog de los buenos y los malos y para comprender este post tal vez deberías leerlo.
No existen las personas buenas o la gente mala… existen gente, personas, a las que podemos detonarles lo bueno o lo malo… Alguien que es muy bueno con sus hijos puede ser muy malo con sus empleados… o alguien que se comporta como un santo en publico puede ser un demonio en casa… Todos llevamos dentro dos fuerzas que pugnan por salir… Luces y sombras se manifiestan en todo momento y negar alguna de esas fuerzas es estar completamente dormidos…

Sin importar la apariencia burda y hasta repulsiva de este geminiano, debemos conectar con su alma y reconocer en el la valentía de enfrentarse a la ardua tarea de gobernar a una potencia mundial, de ponerse en la mira de todo el mundo, de arriesgarse a perder libertad de acción y decisión… porque quien gobierna está detrás, él es solo la imagen de un gobierno.

¿Qué lo está haciendo mal? No!
Si lo observamos a través de los ojos del ego claro que lo está haciendo pésimo… pero si miramos con los ojos del alma debemos agradecer que alguien se atreva a hacer de bufón para ver lo superficiales que somos, lo desconectados de nuestro interior, lo ambiciosos que nos hemos vuelto, lo competitivos y deshumanizados… Nos importan más las cosas que las personas… ponemos altas barreras en nuestras casa para separarnos del resto y solo por cuidar nuestros “valores” materiales… Ridículo? Sí, tal como vemos a Trump…

Y donde quedó aquello de “todos somos uno”? Es fácil decir todos somos uno con la Madre Teresa o con los niños asesinados o los animales abandonados… pero nos cuesta una barbaridad ser uno con Pinochet, con el asesino de esos niños o con quienes abandonan a los perros en una fría noche, en plena lluvia… o con Donald…

Yo creo que este Señor Trump lo está haciendo bien… que es maravilloso sentir esa vergüenza ajena al verlo expresarse, grandioso sentir compasión al verlo burlarse e imitar a otros… porque el es otro tu –otro yo– que ha salido al escenario a mostrarnos cuan ridículos y banales somos como raza, como personas… Y está cerrando un gran ciclo en la vida política y social del mundo entero… Se ha puesto ahí justamente para permitirnos dejar atrás todo aquello que él representa hoy.

Trump es un alma puesta allí donde está por nosotros mismos. Ha salido al escenario para mostrarnos un reflejo de lo que tú y yo somos… ¿Te parece chocante? Pues tendrás que aprender a vivir con ello. Somos seres desconectados de lo esencial y nos hemos quedado en la apariencia de las cosas, de las personas, de las situaciones… ¿Alguien sabe lo que siente Trump al saberse no aceptado, no querido por la sociedad?  Tal vez sus acciones no son mas que una defensa al desamor que él ya conoce desde niño.

Empecemos a mirar con los ojos del alma… sin juicios, sin críticas, solo con aceptación y gratitud a esta alma que se ha puesto al servicio nuestro, que ha venido a espejarnos porque sus acciones, en los niveles álmicos son enseñanza pura… Bajemos la soberbia y la crítica para simplemente ver al nuevo presidente de los Estados Unidos como lo que es: un alma servidora…

En Alegria, Amor y Conciencia.

Me® 

 Si reenvías este texto, respeta el trabajo de la autora, no elimines ni cambies su nombre ni el texto. Cita la fuente correctamente. Se consciente de tu ética espiritual.

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